Monday, May 15, 2006

Catálogo magistral.

Hay maestros que ridiculizan a sus alumnos y maestros que son importantes en la formación no sólo académica sino afectiva, sentimental y vital de sus alumnos. Estos últimos son buenos maestros. Los otros son unos hijos de puta. Hay maestros de bricolaje y albañilería. Les llaman maestros. Hay maestros de música, de jabalina, de cetrería, de filosofía, de buceo, de matemáticas, de literatura. Hay maestros que visten muy mal, que llevan la misma corbata una y otra vez, con obstinación, al salón de clases; maestros que se manchan de gis las manos y el traje. Hay maestros a quienes no se les obliga vestir de manera tan formal ante sus alumnos y a quienes se les permite usar chanclas y guayaberas, dependiendo del clima. Hay maestros hippies que en lugar de enseñar geometría enseñan el juego de las formas y las estatuas a sus alumnos --alumnos que usualmente terminan siendo artistas o algo igualmente frustrado. Hay maestros terribles, maliciosos, que se acuestan con sus alumnas; hay maestros atormentados por sus jóvenes figuras y la incapacidad de acercarse a ellas. Hay maestros a quienes les llaman por las noches para pedirles ayuda. Hay maestros que quisieran ya no contestar, tener su propia vida, ser dejados en paz, pero que contestan, con un fuerte sentido de moralidad. Hay maestros de karate y maestros de judo, hay maestros de baseball y gramática que les enseñan a sus alumnos a valerse por sí mismos. Hay maestros de los que siempre nos acordamos y maestros que pasan por nuestra vida como si fueran una voz que a menudo confundimos con la nuestra. Hay maestros que nos acomodan bajo sus alas y maestros que arrojan a sus aguiluchos hacia el peñasco, para que aprendan a volar, alertas para rescatarlos en el último momento.

3 comments:

Adriana Degetau said...

y también hay maestras.
jejejejeje....

great post! catálogo catálgo, ajá ajá... chuc chuc

Hector Zagal said...

Hay maestros que regalan las calificaciones. Hay maestros que las venden. Hay maestros que cambian las calificaciones por favores. Hay maestros sádicos que gozan reprobando a sus alumnos. Hay maestros decepcionados de sus maestros.

Anonymous said...

Hay maestros que no saben retribuir a sus alumnos algunos beneficios tales como la exención cuando se tiene un alto promedio. Hay alumnos decepcionados en ese tema de sus maestros.