Thursday, March 09, 2006

La mayor parte del tiempo soy parte del mundo.

Diario pasan cosas. La gente encuentra y pierde amor. La gente ve películas que le recuerdan que suceden nuevas e importantes cosas, algunas de ellas en la playa, otras en una noche estrellada bajo una luz que parece divina o de un helicóptero en búsqueda de un Tiranosaurio Rex o un asesino serial, como si se tratara de una película de Spielberg o de David Fincher. En ocasiones explotan acueductos y se derriban edificios, batallas se libran en el desierto o personas deciden cambiar su vida por un libro, traicionar a su amigo por una mujer, asesinar a su madre, ganarse la lotería, entrar en coma, y muchas otras tantas cosas. Y también: cuando uno experimenta uno de estos sucesos, ¿no sienten como si ya los hubieran experimentador por alguien más? ¿Como si, simplemente, no estuvieran ahí sino en una novela de Camus o de Brett Easton Ellis o de Delillo; o en una película monótona y triste? O al revés, en un programa de concursos o en una serie televisiva, donde todo mundo sonríe y tiene grandes y bellas historias sobre felicidad y amor y arracheras con ensalada.

5 comments:

david-. said...

Viva Dostoievski.

david-. said...

Caray ¿a quién la cae tan mal el Gran Inquisidor para poner todo eso?

lafiebredelmono said...

yo he sentido que estoy en un cuento tuyo una ves que llegaron unos a mi clinica picados por un alacran. (pero estos si se salvaron)

Guillermo Núñez said...

Menos mal que se hayan salvado. No puedo creer que recordaras eso. Me parece un mal cuento, ahora. Saludos.

Mariana said...

hay personas que escriben pensando que viven en su escritura y viven pensando que escriben su vida.