Friday, March 16, 2007

Les semaines et leur succession

Planeaba dejar toda esta semana la actulización que correspondía exclusivamente al Inquilino y al esfuerzo, supuesto, de obtener algo de dinero para su publicación. Pero uno hace planes y nuestra voluntad se ríe. La verdad es que el Inquilino me parece bien pero también me parece poca cosa. Nadie se va a morir por el Inquilino. Nadie va a dejar de tener hambre por el Inquilino. Probablemente alguien tendrá un poco de entusiasmo, yo, por ejemplo; pero esto también desaparecerá para darle su turno al siguiente interés. Recuerdo, una vez más, la manera en que medía mis semanas y unidades de tiempo por el siguiente evento a venir: el estreno de tal o cual película (digamos, Indiana Jones 4) o el nuevo libro del autor predilecto (Los gérmenes del mal, de Bolaño). El concierto, el fin de semana, el nuevo disco, the movie of the week.
Constato una vez más, por las líneas que acabo de borrar, que se me dificulta enormemente escribir sobre las personas a las que más quiero. A tal grado que estoy tentado a borrar estas líneas también. Solidificar a las personas en palabras cuando lo que uno quiere es acción es probablemente el más flaco favor que uno puede hacerle a otra persona. Esta afirmación podrá ser gratuia, pero recuerda siempre que la importancia de la vida de cualquier persona está en el día a día, en el supuesto pesar que produce el pasar de las horas, las semanas y sus lapsos, las sucesiones. Viene un fin de semana largo. ¿Por qué no puedo deshacerme de la impresión de que las semanas son como la vida en la tierra y la esperanza que ponemos en los fines de semana algo similar a la esperanza que ponemos en la vida después de la muerte?
Esto no debería ser así. Cada día. Cada día. Aquí. Ahora.

2 comments:

Smooth said...

Estoy de acuerdo, cada dia, aqui, ahora, pero el Inquilino NO DEBE MORIR, porque aunque sea un sueño que ya no te provoque esa sensacion de que estas lleno al publicarlo, sigue siendo el sueño de muchos, que empezaron juntos y que merecen terminar por un acuerdo comun, cuando ya nadie se sienta satisfecho, mientras haya aunque sea uno que se sienta bien, es justo apoyarlo con su sueño, devoré los dos numeros del Inquilino que me diste, y creo, que no merece morir, y si tiene que morir, si tiene una enfermedad terminal adquirida durante alguno de los viajes del tercer numero, merece, al menos una despedida Digna, hagan un cuarto numero.
ps: gracias por decirme que no deje de escribir...
Smooth

Mariana said...

el inquilino sobrevivirá. comienzan a llegar donativos. donen doneeeeeeeennnnnn!!!!