Sunday, November 06, 2011

Dicho de un toro: Que no tiene resabios y acomete francamente y sin repararse

Estaba leyendo una cita en una bitácora electrónica que administra un amigo en la que se toma una pregunta de Wittgenstein que dice: "¿Qué ganamos con una definición si sólo nos lleva a otros términos aún sin definir?"
Me pregunto en qué contexto se hizo Wittgenstein esta pregunta.
Estaba buscando la definición de contexto y una de las acepciones en desuso del término es "Enredo, maraña o unión de cosas que se enlazan y entretejen" que, creo, da una idea un poco opuesta de la definición que todo mundo más o menos acepta (en la que lo que define aclara).
No sé por qué el diccionario incluye definiciones en desuso.
La primera acepción de definir, en el diccionario de la RAE, es: "
Fijar con claridad, exactitud y precisión la significación de una palabra o la naturaleza de una persona o cosa".
En su cuarta acepción, sin embargo, se coloca un mayor énfasis en el aspecto emocional de lo que significa definir algo:
"Adoptar con decisión una actitud" (la segunda acepción de "decisión" es "Firmeza de carácter").
Cada vez que intento precisar un término un compañero de la oficina me implora que deje de filosofar, lo dice así, con énfasis, casi con veneno, sin querer realmente decir "filosofar" o "deja de aclarar términos" sino lo contrario, "deja de enredar términos". Cada vez que me lo dice -pasa a menudo, pues esto se hace generalmente en un contexto distendido y no ha habido una razón real para pedirle que deje de hacerlo- reímos (aunque creo que mi risa está acompañada por una sensación de desesperanza).
En uno de los avances de la vigésima tercera edición del diccionario de la RAE ya se incluye una definición de "descontextualizar", es decir, "sacar algo de su contexto". Tengo una amiga que solía llamarme "descontextualizador profesional". Esto solía hacerlo también en un contexto distendido, lo cual me ayudó a evitar considerar que en realidad me estaba llamando un sofista. Recuerdo que cuando llegué a dar clases de ética hice un énfasis especial, quizá por el modo en que me educaron, en aclarar que a pesar del uso común del término "sofista" (quien hace uso de razonamientos incorrectos que aparentan ser correctos), no todos los sofistas de la Grecia del siglo V (estoy citando el diccionario de la RAE) hacían uso de los "sofismas", sino que enseñaban "el
arte de analizar los sentidos de las palabras como medio de educación y de influencia sobre los ciudadanos".
Creo que nunca me sentiré cómodo en la desagradable posición del que intenta explicar algo con claridad. A nadie le gustan las cosas claras. Pues las cosas no son claras. Creo que esto lo tengo claro.

1 comment:

Jimena said...

Claro que sí. :)