Friday, June 30, 2006

Más sobre Chatwin: vaqueros y zombies

Ayer por la madrugada leí un poco más de En Patagonia de Chatwin y cuando me cansé anoté unas líneas de mi diario. Comencé: Querido Diario. Luego lo borré. Luego puse la fecha del día y entre otras cosas recordé la última vez que vi una película en la que Robert Redford y Paul Newman actuaban juntos, una película sobre The Sundance Kid y Butch Cassady. Recordé esto porque Bruce Chatwin cuenta cómo se dio a la pista de la historia de Butch Cassady (interpretado en la película por Paul Newman). Chatwin dio con la casa en la que Cassady, cuyo nombre real era Robert Leroy Parker, compartió techo con Harry Longabaugh (Sundance Kid) y la pistolera Etta Place. En la casa, varias décadas después, Chatwin platicó un rato con la actual dueña y sintió el frío que se colaba a través de las paredes mal construidas. En En Patagonia se reproduce una carta escrita por el famoso pistolero (se encontraba en América del Sur escapando de la ley pues entonces, junto a su "pequeña familia de tres", ese ménage á trois tan curioso) que le di a leer a mi padre, pues es fanático de las películas de vaqueros. Como yo, como Chatwin, le pareció que la carta estaba muy bien escrita. Estaba fechada un año antes de la fecha en la que, se cree, murió acribillado por el ejército boliviano.
Platicamos sobre esto hoy por la noche, mi padre y yo. También le di a leer un texto que Vila Matas escribió sobre Clint Eastwood durante el tiempo que trabajó como reseñador de películas para una revista de Barcelona. Hace poco le regalé un par de spaguetti westerns a mi padre, parece que las disfrutó bastante. Desde entonces tenemos bastantes más cosas sobre qué platicar. Cosa curiosa: Once upon a time in the west, una de las películas que le regalé, también incluye su particular ménage á trois. Es buena película, posee un ritmo muy curioso, como el de un hombre que está a punto de morir. Total, que hoy que platicamos sobre esto lo hicimos frente al televisor. Yo estaba viendo The dawn of the dead cuando mi padre llegó a preguntarme cómo me encontraba (no la original, sino el remake, donde los zombies ya no caminan aletargados, como si fueran vaqueros caminando bajo un sol de justicia, sino que corren pues se tratan de zombies muy atléticos y vivarachos) y mi padre no aguantó mucho rato así que se fue a ver otra cosa en otra televisión. Me encantaría que viera la relación que creo existe entre estas películas. La misma violencia sinsentido. Las reglas del género que siempre se están rompiendo. Los muertos vivientes. Pero no sé, creo que lo estoy forzando demasiado.
Total, que en mi diario anoté la última vez que vi una película en la que Robert Redford y Paul Newman trabajan juntos. No hablo de The sting, que vi con mi padre hace como un año, rentada, sino de la de Butch Cassady and the Sundance Kid. No la vi toda. Fue accidental. Era de noche y estaba con un amigo de la infancia y con un amiga. Estábamos en la Condesa y entramos al departamento de un amigo de mi amiga. En el departamento, estaban proyectando en una pared la escena en la que Cassady y The Kid estaban a punto de ser acribillados por el ejército boliviano. No vi el final. Me sentí, recuerdo, en una escena de un libro de Bolaño, donde lo importante de la escena está ocurriendo en otra habitación. Nunca me enteré bien a bien por qué fuimos a aquél departamento aquella noche. Lo que recuerdo es que a Cassady y a The sundance kid ya no les quedaban balas. Chatwin, en En Patagonia, afirma que esta versión de la historia es falsa, que Butch Cassady no murió en a manos del ejército boliviano (1908) sino muchos años después.
La versión del valeroso y ficticio fin de Cassady, apareció por primera vez escrito en 1930 en Elk's Magazine, narrada por el poeta del oeste Arthur Chapman. Me gusta eso de "poeta del oeste". Me encantaría llevar el mote de "Poeta del oeste". A ver si pega. Pero esta versión clásica, según Chatwin, es imprecisa. Y da otras tres posibles versiones. Debo decir que están muy equis.

5 comments:

oscar said...

ni siquiera lo leí, está muy largo.

lafiebredelmono said...

poeta del oeste es como tortuga ninja.. dos palabas que no estan muy amenudo juntas..

Guillermo Núñez said...

Pero suena mejor que "Poeta del este", que es casi como albur.

Anonymous said...

probar metafísicamente que no todo puede tener uñas:

si todo tuviera uñas las uñas tendrían uñas, y las uñas de las uñas también tendrían uñas, lo cual provocaría un infinito en acto, que de acuerdo al Filósofo, es imposible

Anonymous said...

probar metafísicamente que no todo puede tener uñas:

si todo tuviera uñas las uñas tendrían uñas, y las uñas de las uñas también tendrían uñas, lo cual provocaría un infinito en acto, que de acuerdo al Filósofo, es imposible